Rechazamos el racismo en EE.UU y la muerte de George Floyd

 Adultos Mayores de La Isabelica también dicen: I can't breathe !

El colectivo de Adultos y adultas Mayores de La Isabelica, organización popular que activa en esta populosa urbanización de Valencia, mientras debatían sobre asuntos que les conciernen en la cotidianidad, hicieron sentir su repudio a los atropellos que vienen sufriendo los ciudadanos afroamericanos en EE.UU.

Reunidos en la ordinaria asamblea de los lunes, en el ateneo que lleva el nombre de la urbanización, y por supuesto cumpliendo con todas las recomendaciones dadas por el Presidente Nicolás Maduro, se incorporaron al grito que recorre al mundo exigiendo justicia.

Los adultos y la adultas, mostrando pancarta con la leyenda: “The American people cannot breathe, let's do protests at the embassy and offices in the world. George Floyd lives!”, (“El pueblo norteamericano no puede respirar, dejemos oir nuestra protesta en las embajadas y oficinas en el mundo. George Floyd vive!”) quieren dar a conocer el llamado para todos los ciudadanos sensibles del mundo; sin importar color de piel y origen étnico se planten frente a las embajadas y oficinas de negocios gringas, a pedirles en nombre de la raza humana que cesen las atrocidades raciales.

Entre otros, Gustavo Vásquez, Carmen E. Jiménez, Eliecer Véliz, Orlando Díaz, Ingrid González, Nelson Maya y Gerardo Mérida, hicieron saber que solo las movilizaciones verdaderas en las calles y no solo en las redes sociales, es que se puede crear conciencia sobre la necesidad de acabar con ese perverso racismo, que lamentablemente se ha impuesto en perjuicio de hombres y mujeres siempre por quienes se creen una raza superior.

Alegan que saludan con beneplácito las protestas desarrolladas a nivel planetario tal y como de registran a diario, además de a lo interno de Estados Unidos, en toda Europa, África, Asia, Australia y por supuesto en América Latina y el Caribe, siendo estas últimas las que sufrieron en ocasión de la conquista y colonización europea, las más crueles y humillantes discriminaciones tras la invasión que empezó en 1492.

De igual forma, recordaron el exterminio de millones de seres humanos en estas tierras, lo que ha significado el más grande genocidio u holocausto ocurrido en la historia de la humanidad, hechos acaecidos en todo el continente de la mano de una pretendida evangelización hace más de 500 años, lo que se convierte en la deuda humana que jamás debe olvidarse.

Menos aún porque lo que se plantean las grandes potencias imperialistas y sus transnacionales, erigidos como los destinatarios del poder mundial es más discriminación y racismo, y por qué no, hasta llevar a la humanidad a la nueva esclavitud que nos alertara el Cantor del Pueblo en aquella canción profética: Esclavos de esclavos.